Caracas.- Este sábado, 10 de octubre, será proclamado beato Carlo Acutis, el joven que murió el 12 de octubre de 2006 con 15 años y al que todos consideran será «el patrón de la web» por haberse dedicado a hablar de su fe y ayudar a los demás a través de la tecnología.
En estos días se ha vivido una veneración por la figura de este chico, cuyo féretro ha sido abierto. Su cuerpo, vestido con unos vaqueros y una sudadera y su rostro cubierto por una máscara de cera, ha sido expuesto de cara a su beatificación, que se celebrará en la basílica de San Francisco.
Carlo Acutis nació en Londres en 1991 pero vivió en Milán y murió debido a una leucemia fulminante. Aquí te presentamos cómo fue el milagro que lo llevó al camino de la santidad:
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El milagro ocurrió el pasado 12 de octubre de 2010, en la capilla de Nuestra Señora Aparecida, en Campo Grande, Brasil. Un niño que padecía una malformación congénita del páncreas se había acercado con su abuelo al templo para rezar y celebrar el día de la patrona.
Solo una cirugía compleja y peligrosa podría haber eliminado la enfermedad que aquejaba al infante, pero la cirugía nunca se realizó porque se recuperó después de una oración especial celebrada por un sacerdote en presencia de una reliquia de Carlos.
«En el momento de la bendición con la reliquia, se acercó un niño acompañado por su abuelo. El niño estaba enfermo de páncreas anular, una enfermedad congénita que se estaba tratando. Esta enfermedad causaba que el niño vomitara todo el tiempo, lo que lo debilitaba y lo abatía mucho, porque todo lo que comía lo devolvía, incluido el líquido», relató el padre Marcelo Tenorio, vicepostulador de la causa de canonización de Carlo.
Durante la bendición, el niño le preguntó a su abuelo, que era su acompañante, qué debía pedir y este le dijo que rezara, pidiendo «para dejar de vomitar», y así sucedió. Cuando llegó el turno del enfermo, tocó la reliquia de Carlo y dijo con voz firme: «dejar de vomitar» y, a partir de entonces, ya no vomitó más.
Cuando en febrero de 2011 se realizaron nuevas pruebas médicas se pudo comprobar que el niño estaba completamente curado. Este relato, reconocido por la Congregación para las Causas de los Santos, fue lo que dio inicio al proceso de canonización.
Con información de EFE