Puerto Cabello.- Un número no determinado de trabajadores de la refinería El Palito, estado Carabobo, fue detenido por el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) y pasado a jurisdicción del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) bajo señalamientos de retardos y sabotaje en las labores para reactivar la planta.
Bajo condición de mantener su identidad en reserva, voces de la refinería informaron a El Pitazo que la más reciente de estas detenciones se practicó el viernes 27 de noviembre en horas de la mañana. Ese día se detuvo a un operador que fue acusado de negarse a ejecutar un trabajo de soldadura en una tubería.
«A otros compañeros los han detenido por señalamientos de flojera, falta de concentración en sus labores y la sospecha de sabotaje. Los jefes no entienden que el personal hace demasiado en unas instalaciones que fueron abandonadas durante años y ahora pasan factura», dijo uno del grupo de trabajadores.
«Se ha llegado a casos en los que se ordena remendar una tubería, pero el técnico dictamina que no aguanta una soldadura más, que ya tiene muchas y que hacerlo de nuevo puede implicar riesgos de seguridad industrial. La respuesta de los jefes de seguridad es que están obligados a hacer lo que se les pide so riesgo de ser señalados, y detenidos, por sabotear la industria», agregó otro de los empleados petroleros.
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Los integrantes del grupo explicaron que los trabajadores de la refinería El Palito son unos héroes que «con las uñas», sin el instrumental idóneo, realizan una labor permanente que ha permitido en más de 26 ocasiones, en los últimos seis meses, reiniciar la planta cuando esta se ha paralizado. Por tal razón, mal puede señalarse a alguno de ellos como saboteador.
«Hace más de un mes tenemos al Sebin y a la Dgcim en la refinería. Podemos entender que deben vigilar unas instalaciones estratégicas, pero poner bajo sospecha a un trabajador porque se encuentre preocupado, deprimido o lento en un momento de sus labores es exagerado», expresó otro de los declarantes.
«No puede tomarse un descuido momentáneo de un trabajador como un acto de sabotaje. Ese trabajador es un venezolano que, como millones, es probable que no duerma bien, pensando en cómo llevar la comida a su casa, sin gas, sin energía eléctrica y sin agua, como está hace tiempo Puerto Cabello», señaló uno de los técnicos de Pdvsa.
Sobre el estatus de los compañeros detenidos, los consultados dijeron no saber si los están interrogando ni cuál es su situación judicial.