Comprar medicina o comprar comida, pagar una cita médica o algún servicio. Los jubilados y pensionados del centro de Venezuela se debaten en esas diatribas, pues los montos que perciben por concepto de pensión de vejez o jubilación, simplemente no alcanzan para cubrir sus necesidades más básicas.
Fue esa insatisfacción la que los llevó a la calle este martes 26 de abril, con marchas y concentraciones en Maiquetía, Los Teques y Valencia.
En el caso de Vargas, integrantes del Frente de Jubilados y Pensionados realizaron una marcha en protesta al bajo monto de la pensión que devengan.
«La mayoría de nosotros sobrevive con 130 bolívares mensuales, lo que puede ser calculado como 28 dólares al mes. Tenemos que escoger entre comer y comprar medicinas, que nunca alcanzan. Hoy en Venezuela ningún jubilado o pensionado puede decir que se mantiene de su jubilación o pensión, porque es imposible«, refirió Asdrúbal Salazar, vocero del frente de pensionados y jubilados en el litoral central.
La manifestación salió de la plaza Los Maestros, recorrió el centro de Maiquetía y llegó hasta el centro comercial El Pozo, para entregar en la Defensoría del Pueblo una carta donde se exige que el monto por concepto de pensión debe, por lo menos cubrir las necesidades básicas de cada ciudadano.
En Carabobo, los adultos mayores protestaron en el norte de Valencia para llamar la atención de las autoridades regionales y nacionales, a quienes solicitan ingresos ajustados a la inflación, que les permitan comprar, al menos, alimentos y medicinas, pues aseguran que viven de la caridad de familiares y amigos.
“Si compramos medicamentos, no compramos alimentos, si compramos alimentos, no compramos medicamentos. No podemos comprar ropa ni calzado”, expresó Alba Morales, representante del Comité de Derechos Humanos para la Defensa de los Jubilados, Pensionados, Adultos Mayores y Personas con Discapacidad de Carabobo.
La vocera también denunció que algunos adultos mayores, después de jubilados, han recurrido a buscar empleos, como vigilantes y personal de mantenimiento en empresas y casas, para poder incrementar sus ingresos y comprar comida.
En la ciudad de Los Teques, capital del estado Miranda, también hubo protestas. Los manifestantes, entre ellos, educadores y enfermeras, se concentraron en la calle Miquilén y caminaron hasta la sede del Ministerio del Trabajo para entregar un documento.
“Exigimos sueldos dignos y el pago de los beneficios establecidos en la contratación colectiva” se leía en sus pancartas.
Con información de Nadeska Noriega y Rossana Batistelli