La población migrante de Uribia, Riohacha y Maicao cuenta con medios y plataformas de comunicación propios, generados por infociudadanos y comunicadores comunitarios, quienes se han convertido en la voz de sus comunidades. Se trata de, al menos, 50 mujeres, hombres, jóvenes y adolescentes migrantes venezolanos y de la etnia wayuu que integran cuatro semilleros de comunicación.
Estas personas crean contenidos y transmiten información desde su territorio en español y wayuunaiki, al eje transfronterizo y forman parte de este proyecto que los une y los apoya.
Tejer la palabra sin fronteras para una migración conectada que aporta al territorio es un proyecto que nació con el objetivo de fortalecer y amplificar la voz de la población migrante y retornada, no solo en capacidades de comunicación para el cambio de comportamiento social, sino en la apropiación de sus derechos como migrantes.
Esta iniciativa, impulsada por la alianza entre el consorcio Wayuunaiki-FDI (Fundación para el Desarrollo Intercultural) y el programa Conectando Caminos por los Derechos, de USAID, busca contribuir a mejorar los flujos de información y la participación de la comunidad a través de infociudadanos, corresponsales juveniles o comunicadores comunitarios, que se conectan y son un parlante a las necesidades, historias y dinámicas del territorio.
Los semilleros están integrados por líderes y lideresas comunitarios, mujeres, jóvenes, LGTBIQ+, migrantes, retornados y población de acogida y wayuu en vastos asentamientos en La Guajira colombiana: Cardón Guajiro (Riohacha), La Bendición de Dios 2 (Maicao), El Aeropuerto (Uribia), en La Guajira colombiana.
Después de recibir capacitaciones sobre los derechos de la movilidad humana y sobre formatos de comunicación, se constituyeron en los semilleros Cardón Guajiro en Riohacha; Liderazgo Juvenil y Kottirashiwayaa (Todos unidos) en Uribia, y La Bendición de Dios 2 en Maicao.
Las personas responsables y que llevan adelante este proyecto son: Astrid Yepes Ladino, asesora técnica por parte de FDI y Ana Karolina Mendoza, coordinadora en territorio por parte de Wayuunaiki. Este equipo tiene una alianza con El Pitazo a través de Alatakaa, El Pitazo suena en wayuunaiki.
Desde el enfoque técnico del proyecto aprenden a ser voceros en sus entornos y multiplicadores de información veraz, oportuna y pertinente, co creando contenidos con enfoque diferencial y perspectiva de género.
Las producciones son consensuadas en talleres de comunicación y periodismo comunitario con el apoyo de mentores en comunicación binacional, wayuu. También, están orientadas a generar procesos de cambio social y edu-comunicación, por lo cual parten de historias que reflejan las necesidades de los grupos poblacionales, informan sobre rutas de atención y, básicamente, hablan de cómo empoderarse de los derechos.